Necesitas un local donde tu
clientela tenga la posibilidad de acceder a los alimentos orgánicos. Para esto
puedes optar por una tienda convencional o un mini-mercado.
Puedes
poner góndolas en tu local, separando los productos o simplemente ubicar
repisas, como en cualquier tienda.
Para que
los clientes se sientan seguros de lo que están comprando, debes ubicar en
algún lugar visible, letreros con copias de las certificaciones de que tus
productos son orgánicos, de esta manera, estarán seguros de que no los estás
engañando.
No olvides
incorporar el sistema de reparto a domicilio dentro de una ruta específica, de
esta forma crearás fidelización de los clientes mostrando la oferta por
Internet o a través de catálogos que puedes entregar en la misma tienda.
La decoración es de suma
importancia, pues es recomendable que sea natural y ecológica. También puedes
poner en la entrada un estacionamiento de bicicletas, con el fin de que tus
clientes se dirijan en este medio de transporte a comprar sus alimentos.
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