sábado, 21 de septiembre de 2013

RECETAS SALUDABLES



Refresco de Maca Avena con Mango.

Ingredientes

¾ taza de Maca Avena
6    tazas de agua.
Una taza de azúcar
2 rajas de canela
2 clavos de olor.
1 kilo de mango.
Preparación:

1.  En una cacerola poner el agua, Maca avena, canela y clavo de olor.
2.  Llevar al fuego hasta que rompa el hervor.
3.  Agregar el azúcar.
4.  Revolver y hervir por 5 minutos removiendo con una cuchara
5.  Retirar la canela y el clavo de olor.
6.  Agregar el mango en trozos.
           Licuar y añadir hielo.
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Existen muchas alternativas de grasas “buenas”, como los ácidos grasos OMEGA – 6  ( presentes en la semilla de girasol, soya y maíz ) y los ácidos grasos OMEGA – 3 ( que se les encuentra en pescados como la CABALLA, JUREL, ATUN, ETC ). La linaza también es una fuente de rica en OMEGA – 3 . Consúmala preferentemente molida y añádala en sus jugos. En el Perú existe un alimento que deslumbra al mundo por su elevado contenido de OMEGA – 3 : el SACHA INCHI, que se comercializa en forma de aceite. También constituyen elecciones saludables el aceite de oliva, maní, nueces, pecanas, almendras, paltas. Es preferible usar el aceite de oliva rociándolo en las ensaladas, no para freír.
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SALUD y VIDA NATURAL

Existe un hecho comprobado de que las personas activas viven una vida mas completa. Gozan de más vigor, resisten mejor las enfermedades y no pierden la línea. Tienen más confianza en sí misma, están menos deprimidas y a menudo, incluso en edad avanzada, trabajan aún con energía en nuevos proyectos.
Muchas veces el deterioro de la salud está directamente relacionado con la ausencia de actividad física. La conciencia de esto está cambiando los estilos de vida. La única manera de prevenir las enfermedades generadas por la inactividad es mantenerse activo, pero no unos días, sino toda la vida.
Sin un ejercicio físico diario, el cuerpo se vuelve almacén de tensiones sin liberar. Sin una salida natural para esas tensiones los músculos se debilitan y se vuelven rígidos. Así perdemos contacto con las energías de la vida.
Existen dos condiciones previas para recuperar la flexibilidad corporal: conciencia y constancia. Un trabajo en forma relajada y perseverante, sin querer sobrepasar antes de tiempo los límites ni competir con el propio cuerpo. 


Estirarse es el vínculo idóneo entre la vida sedentaria y la vida activa. Mantiene los músculos flexibles, los prepara para el movimiento, ayuda a la transición diaria desde la inactividad a la vigorosa actividad sin tensiones excesivas. Estirarse antes y después de los ejercicios mantendrá al cuerpo flexible, sacará el mejor partido de las capacidades y ayudará a prevenir las lesiones más comunes.
        Podemos aprender mucho de los animales. Un gato, por ejemplo, sabe instintivamente como estirarse. Lo hace espontánea, natural y cotidianamente.
        Estirarse es fácil, pero cuando se realiza en forma incorrecta, puede perjudicar más que beneficiar. El estiramiento debe ajustarse a la estructura muscular particular, a la flexibilidad y a los niveles cambiantes de tensión.
        Estirarse no supone agobiarse. Es una actividad relajante y no competitiva. Es algo simple, una forma indolora de prepararse para el movimiento. Hasta es divertido.
        Todo el mundo puede aprender a estirarse, sin importar la edad o la flexibilidad. No es necesario poseer una condición física extraordinaria, ni especial aptitud atlética. Si se encuentra usted sano, sin ningún problema físico específico, aprenda a disfrutar estirándose y sin riesgos.
 

Puede estirarse a cualquier hora, por la mañana antes de iniciar el día, en el trabajo para liberar la tensión nerviosa, después de estar de pie o sentado durante mucho tiempo, cuando se sienta rígido, mientras se escucha música o se ve televisión, etc...
        La manera correcta es un estiramiento relajado y sostenido con la atención concentrada en los músculos que se están estirando. La manera incorrecta es hacer movimientos de vaivén o estirarse hasta el dolor.
        Según la Organización Panamericana de la Salud, la ausencia de actividad física es la cuarta causa de mortalidad por enfermedades no transmisibles a nivel mundial, produciendo más de tres millones de muertes prevenibles. Es responsable también de la creciente tasa de obesidad en la población infantil y adulta. Adopte un estilo de vida saludable y reduzca sus probabilidades de padecer enfermedades no transmisibles ( cardiacas, obesidad, diabetes, osteoporosis – el ejercicio incrementa la masa ósea a cualquier edad- entre otras ), además, mejora el estado de ánimo y fortalece los vínculos familiares o amicales. 




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